La​ GeometrÃa ​ ​de ​Dios
Amor​ en ​ 3D Efesios ​ ​3:14-21
Autor:​ Dr. ​ Jorge ​ E. ​ Rodriguez ​ ​Sierra
Introducción
Las palabras que decimos nos definen, revelan lo que uno cree y piensa y a través de lo que hablamos lo revelamos a los demás. La oración hace lo mismo, lo que le decimos y cómo lo decimos a Dios revela que es para nosotros lo más importante y cuál es nuestra percepción de Dios. Pablo al escribir está carta a la Iglesia en Efeso nos permite ver que era lo que le llevaba a está misionero a orar y lo que le pedÃa a Dios. Este tipo de oración es algo que poco se practica y que muy pero muy poco se enseña desde los púlpitos y por las religiones que más predominan en la actualidad. Les invito a conocer las razones por las cuales Pablo y también​ nosotros ​ deberÃamos ​ ​doblar ​nuestras ​rodillas.
Doblando​ las ​ ​rodillas ​(Efesios ​3:14)
Lo primero que Pablo nos dice es que él dobla sus rodillas, acto que nos habla de sumisión y de reconocer la importancia de la otra persona. El Apóstol nos deja claro que este acto lo hace ante el Padre del Señor Jesucristo. El segundo mandamiento nos dice que el hombre no puede inclinarse frente a ninguna imagen (Éxodo 20:4-5, Leviticos 26:1). Cuando Jesús fue tentado por Satanás le pidió que se postrara ante él, Jesús le contestó que la Biblia en Deuteronomio 6:13 dice que todo acto de adoración solo le corresponde a Dios (Mateo 4:8-10). Cornelio cuando se postró al ver al Apóstol Pedro este lo levantó inmediatamente ya que era hombre como él y por lo tanto indigno de cualquier acto de adoración (Hechos 10:25-26). La Biblia nos aclara que toda rodilla se debe de doblar solo ante Jesús y nadie más (Filipenses 2:10). Se que esto le puede resultar contrario a sus creencias y costumbres religiosas pero la Biblia es muy clara en este punto, puede que no esté de acuerdo pero entonces el desacuerdo es entre usted y Dios, le invito a que tenga la misma convicción que Pedro y Juan tuvieron cuando dijeron que era más importante obedecer a Dios que lo que los hombres dicen, que el dÃa​ de ​ ​hoy ​se ​conoce ​como ​tradición ​(Hechos ​5:29).
En​ familia ​ ​(Efesios ​3:15)
Pablo afirma que hay una sola familia en la tierra y en los cielos y que su reconocimiento es dado por Dios. El Apóstol Juan nos aclara que los que reciben y creen en el nombre de Jesús, Dios les dio la autoridad de ser hechos hijos de Él y que está designación no es por herencia, ni por qué el hombre lo consiga en sus esfuerzos, ni porque sea impuesto por los hombres, sólo Dios es quien le da al hombre está increÃble distinción (Juan 1:12-13). El cristiano por lo tanto es miembro de la familia de Dios (Efesios 2:19). Está aclaración es muy importante porque todo lo demás que escribe Pablo es en forma exclusiva para lo que pertenecen​ a ​ está ​ ​familia.
Proporcionando​ ​ ​(Efesios ​3:16)
En la primera parte de este versÃculo Pablo nos dice que es Dios quien hará posible cada una de las peticiones que va hacer en favor de la familia de Dios, nadie más puede ni tiene el poder de contestar nuestras peticiones. Y la respuesta será en relación directa a las riquezas que Dios posee. El autor del primer libro de Crónicas nos dice que todo lo que está en el cielo y en la tierra es de Dios, también todo lo que tenemos viene de su mano (1 de Crónicas 29:11-12) y el salmista nos dice que el cielo y el firmamento nos hablan de la gloria de Dios y lo que Él hizo con sus manos (Salmos 19:1). Pablo en está oración reconoce que las riquezas de Dios son ilimitadas y que todo lo que van a recibir procede de Él. Estas son palabras que todo exponente de la enseñanza de la prosperidad le gusta decir y a sus seguidores oÃr, pero contrario a lo que este tipo de enseñanza falsa proclama Pablo a continuación nos deja muy en claro lo que un hijo de Dios​ debe ​ pedir ​ cuando ​ ora.
Peticiones​ ​(Efesios ​3:16-19)
Ahora Pablo nos va a decir la razón por la cual dobla su rodilla ante Dios pidiéndole que conteste a su petición de acuerdo con las riquezas y recursos ilimitados que tiene​ ​a ​ su ​ disposición.
Poder​. Una de las cosas que han movido al hombre a través de la historia es su deseo de obtener poder, pero en está oración de Pablo lo que él le pide a Dios es un poder totalmente diferente a lo que un hombre que no está bajo la autoridad de Dios busca. Su primera petición es que Dios conceda fortaleza a los miembros de su familia y que está sea acompañada de poder, pero que sea para el hombre interior, en otras palabras para su vida espiritual. La razón de ello es porque el hombre que se convierte va a librar una batalla continua contra sus deseos carnales (Romanos 7:18-25) y al estar fuerte espiritualmente podrá estar listo para resistir la tentación. El hombre en realidad es débil y sólo en el poder y la fuerza que Dios le da es como el cristiano podrá salir victorioso de sus batallas contra la tentación (Efesios 6:10-13). Pablo pide a Dios que el hombre que ahora es de su familia viva de acuerdo a sus estatutos y ordenanzas, quiere que sean obedientes a su Palabra, que vivan una vida victoriosa y sean ejemplos a los que aún no conocen a Cristo (1 de Tesalonicenses 1:7, 1 de Timoteo​ 4:12).
Habitación​. Quien no quiere tener una casa con todas las comodidades? Muchos hombres se consumen por tener la casa de sus sueños, pero Pablo en está oración no está pidiendo que el cristiano tenga una casa lujosa, lo único que a él le interesa es que Cristo sea quien habite en los corazones de los creyentes. Lo material está totalmente fuera de la mente de Pablo, en lo único que se enfoca en esta petición es estrictamente espiritual. Lo que pide en su oración es que Cristo sea el Señor de la vida del cristiano, que tengan una comunión Ãntima, una relación cercana y permanente, que Cristo sea el motor y el centro de sus vidas, que se sometan en obediencia sólo a Jesús porqué decidieron creer en su nombre. El hombre que ama a Jesús obedece lo que Dios dice en su Palabra y serán aquellos en donde Dios va a morar (Juan 14:23), Pablo después en su carta a las Iglesias de Galacia declara que él ya no vive sino que Cristo vive en él (Gálatas 2:20).
Inteligencia​. La siguiente petición de Pablo se centra en que el creyente sea capaz de comprender, o sea que tenga las herramientas necesarias para poder tener una idea clara lo que es el amor de Dios. Los medios que hacen posible para que esto se puede entender es que el hombre tenga unas raÃces profundas y que su fundamento sea el amor. En otras palabras que ame a Dios sobre todas las cosas que es el primero y más grande mandamiento (Deuteronomio 6:5, Mateo 22:36-38). Está petición es para cada uno de los miembros de la familia de Dios sin excluir a ninguno. Y lo que Pablo quiere es que el creyente llegue a conocer con toda precisión las siguientes caracterÃsticas del amor: la anchura, la longitud, la profundidad y la altura. El amor de acuerdo a este pasaje es algo que no solo es algo lineal sino es algo que está en tercera dimensión.
La Longitud ​en términos de geometrÃa nos habla de la máxima extensión horizontal; esto nos dice que el amor tiene un alcance lineal por lo que nos lleva a conectarnos con el prójimo (Juan 13:35, 1 Tesalonicenses​ 4:9, ​ Romanos ​ ​12:10).
La ​Base nos dice que el amor es el soporte, lo que sostiene, es en lo que descansa el creyente (2 de Corintios​ 12:10, ​ 2 ​ Timoteo ​ 2:10).
La ​Altura nos habla de la posición sublime del amor, de su grandeza, pero también de que este amor nos permite poder llegar a tener una relación con Dios, en otras palabras nos permite conectarnos con Él (1 de Juan 5:14, Salmos 145:18, Hebreos 4:16) y nos da un lugar de prominencia y riqueza espiritual por haber creÃdo​ ​en ​Jesús ​​ ​(Salmo ​91:14, ​ 2 ​ de ​ ​Corintios ​ ​8:9).
La ​Profundidad nos habla de volumen, asà que el amor no solo es algo lineal sino es algo que contiene volumen. La fórmula para obtener el volumen es multiplicar la longitud por la altura y el resultado multiplicarlo por la anchura. Ahora apliquemos está fórmula al amor: Amor longitudinal por la altura del amor por la anchura del amor nos da por resultado un nombre y este es Jesús (Romanos 5:8, Juan 3:16, Juan 15:13) Efesios 2:4-10 nos describe perfectamente estos conceptos que Pablo establece en este pasaje, nos presenta la riqueza de Dios, nos afirma en el versÃculo 4 que la cantidad de su amor es grande (volumen), nos dice en el versÃculo 5 al 7 que su amor nos va a dar el regalo y el privilegio inmerecido de llegar al cielo (altura), en el versÃculo 8 nos aclara que la fe que es creer en Jesús es lo que nos da la salvación (base) y finalmente el versÃculo 10 nos dice que en respuesta a esto haremos buenas obras en obediencia a Dios y que lo vamos a demostrar al amar a nuestro prójimo (longitud). Pablo llega a la conclusión que el amor de Cristo es algo que está más allá de nuestra capacidad mental, de poder comprender con nuestro intelecto y por ello Pablo pide a Dios que nos de sus grandes riquezas la capacidad para poder empezar a entender lo sublime y extraordinario​ que ​ es ​ su ​ amor.
Sin falta de nada​. La palabra plenitud significa estar completo sin que nada falte, pero Pablo no está hablando de bienes materiales, lo que él pide es que el cristiano esté lleno de Dios. Pablo ora que el creyente esté tan lleno del amor de Dios, que sea tan fuerte espiritualmente, que este tan sometido a Dios que ya no haya más lugar para el ego, el yo y el orgullo del hombre. Que el creyente viva bajo la voluntad de Dios en forma total, que su mente sea la de Cristo (1 de Corintios 2:16) y que su meta sea alcanzar la estatura del varón perfecto (Efesios 4:13) para que de está forma el cristiano pueda moldear su vida para parecerse más cada​ ​dÃa ​a ​Jesús.
Para​ ​su ​gloria ​​(Efesios ​3:20-21)
El único objetivo de todas estas peticiones es dar crédito y alabanza a Dios para siempre y por siempre. Nunca se ha tratado de nosotros, de conseguir aplausos, de ser admirados por los demás porque nada de esto es posible en nuestros esfuerzos, cada victoria conseguida en la vida cristiana es por Dios y Él es el único digno de ser acreditado por cada logro conseguido, lo único que hace el hombre es someterse a Dios y dejar que su poder se exprese a pesar de la debilidad y la condición imperfecta que el hombre tiene. El cristiano sabe con plena seguridad que Dios es tan poderoso que puede contestar cualquier petición que se le presente siempre y cuando asà lo decida porque está de acuerdo a su voluntad, para ello el hombre requiere hacer a un lado su ego y dejar que Dios tome control de su​ vida.
Por​ está ​ causa
En la actualidad la gente dobla sus rodillas para pedirle a Dios por cosas materiales, por logros personales, para no batallar, para no sufrir, para no enfermar, para conseguir logros profesionales y laborales, para vivir vidas cómodas, eso en realidad no es malo pero lamentable reflejan que las prioridades que dominan el corazón de estos hombres son materiales y que no están interesados en madurar espiritualmente, no es una prioridad conocer mejor a Dios y someterse a su voluntad. Al parecer estos cristianos por lo que Pablo está orando tenÃan la vida resuelta, ya que ni se molestó en pedir por la salud fÃsica, ni por mejorÃa económica, ni por sus trabajos o por problemas en general, pero esto no era asà estos cristianos tenÃan problemas como todos los tenemos pero Pablo sabÃa que si primero buscamos el reino de Dios y su justicia, Dios se encargara de lo demás​ sin ​ duda ​ alguna ​ (Mateo ​ 6:33). Cuándo fue la última ocasión o más bien alguna vez ha orado usted asà como Pablo oró en este pasaje? Lo que ora refleja lo que es importante para usted. Le invito a que se tome el tiempo para hacer un inventario de lo que le pide a Dios, sea honesto y si solo encuentra que sus peticiones son para su bien personal entonces doble su rodilla pÃdale perdón a Dios y empiece a orar para que Dios le ayude a crecer espiritualmente, que sea fuerte para vencer la tentación, que pueda empezar a conocer el amor de Dios y que su vida quede bajo el control absoluto de Él, solo asà viviremos vidas victoriosas y útiles al servicio de Dios tal como lo fue la vida de Pablo. Le invito a que oraremos dando prioridad a lo espiritual porque puede estar seguro que Dios ya se​ encargó ​ ​de ​ ​todo ​ lo ​ ​demás.
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